Max El-Mann Arazi habla de lo que la gente debería saber sobre el mercado inmobiliario actualmente
La pandemia COVID-19 ha provocado algunos cambios en la forma en que el mundo está interconectado. También, la forma en que hacemos negocios y vivimos nuestras vidas ha cambiado. En la Ciudad de México, la economía ha sido alterada por la COVID-19, y nadie había previsto que esto sucedería. Algunas industrias están luchando para encontrar remedios y respuestas a algunos de los dilemas fiscales que están presentes en este momento.
Como inversionista inmobiliario, Max El-Mann Arazi recientemente sopesó lo que está sucediendo con los bienes raíces. En este momento, Max está sirviendo como director de Fibra Uno.
Acerca de Fibra Uno
Fibra Uno es uno de los principales fideicomisos inmobiliarios de México. La compañía ha logrado hacer grandes negocios de inversión desde su creación. Fibra Uno se centra principalmente en asegurar que han creado valor a largo plazo para cada inversor desarrollando, comprando y revendiendo propiedades comerciales.
Como director, Max El-Mann Arazi tiene la tarea de dirigir cada uno de estos procesos. Ha estado trabajando en el sector inmobiliario durante al menos cuatro décadas. Como resultado, está en una mejor posición para ofrecer una guía sutil a cada inversor. Dado que Max El-Mann Arazi está bien versado en asuntos relacionados con el sector inmobiliario, su perspicacia para los negocios ha demostrado ser crucial, especialmente cuando se trata de proteger la Fibra Uno contra los efectos de COVID-19.
Según Max El-Mann Arazi, si se quiere vender o comprar una propiedad comercial o residencial, se debe encontrar un equilibrio entre el optimismo y el pesimismo. Puede ser difícil encontrar un equilibrio. También hay una afluencia de titulares durante este período, y parece que el mundo está llegando a su fin. En cuanto a Max El-Mann Arazi, ha logrado identificar numerosas oportunidades en el sector inmobiliario.
Mientras piensa en el optimismo y el pragmatismo, hay algunas consideraciones que se supone que debe hacer. Como resultado de COVID-19, la gente se ha visto obligada a distanciarse de los demás. En el proceso, puede ser imposible reunirse con un cliente y mostrarle una casa en particular. Sin embargo, las visitas de los clientes pueden realizarse virtualmente.
El principal problema con los tratos virtuales es que puede ser difícil cerrar el trato. Hay diferentes complejidades en el manejo de las transacciones de bienes raíces. Tales tratos deben ser manejados cara a cara. Si está a punto de cerrar un trato, debe tener la mente abierta ya que también se espera que experimente algunos retrasos. Es aconsejable tomarse más tiempo al manejar las ventas que tomar un atajo ya que puede resultar costoso a largo plazo.
La logística básica debe dejarse de lado. Debería preguntarse si el mercado inmobiliario está funcionando como de costumbre. Se dará cuenta de que no está funcionando como de costumbre.
Otros desafíos también han surgido como resultado de la pandemia de COVID-19. Por ejemplo, la tasa de desempleo ha aumentado. El mercado de valores también se ha visto afectado negativamente. Max El-Mann Arazi tiene un profundo conocimiento de los problemas que los compradores y vendedores están enfrentando en el mercado inmobiliario durante este período.
En los Estados Unidos, las tasas de interés han sido reducidas por la Reserva Federal como resultado de la pandemia COVID-19. Los compradores, a su vez, se beneficiarán de las bajas tasas de hipotecas. Dicho esto, el estado del desarrollo y la compra de viviendas suele variar dependiendo del lugar donde se reside y si los bienes inmuebles son considerados como un servicio esencial por el gobierno.
La industria inmobiliaria también comprende diferentes sectores y servicios. La industria depende de profesionales como inspectores de vivienda, constructores, agentes, oficiales de préstamos y tasadores. Cada entidad debe ser considerada un servicio esencial. Si no, la industria sufrirá terriblemente.